La gira más salvaje de Iggy Pop: “Si no hay coca, no se toca”

Compartiendo escenario con Blondie, Iggy Pop y su banda desataron el caos de gira
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En una nueva entrevista con Classic Rock (vía Loudwire), el batería Clem Burke ha recordado la gira en la que conoció a Iggy Pop. Esto sucedió en 1977, cuando Pop y su banda, de la que él formaba parte, giraron junto a Blondie. Lo que vio el artista en aquel tour -en cuestión de excesos- le dejaría marcado para siempre.

"Más tarde estuve de gira como parte de la banda de Iggy durante seis semanas promocionando el álbum 'Party' en el 81 y él estaba básicamente fuera de sí", cuenta Burke. "No se permitía comida en el backstage, sólo drogas y alcohol".

En esta gira, entre otras cosas, Pop se reventó el micrófono contra su propia cara saltándose un diente. Este bestial tour quedó reflejado en 'Live in San Fran 1981' (1983), grabado en noviembre de aquel año en el Warfield Theatre de San Francisco. De este concierto también se lanzaría un DVD en 2005.

“No hay coca, no se toca”

Era 'no hay coca, no se toca'”, sigue narrando Burke. Su única instrucción durante la gira fue “tocar tan fuerte y rápido como pudiera”.

Eso sí, las drogas no reflejaban nada bueno. 'Party' fue el último disco de Pop con Arista Records después de que llegara, como punto más alto, al 166 del Billboard 200. A finales de los '70, con 'The Idiot', su colaboración con David Bowie, había llegado al Top 30 de Reino Unido.

En aquel momento, Pop invitó a Blondie para ser su telonera en la gira de 'The Idiot' en 1977. La banda, de la que Burke formaba parte, acababa de estrenar su primer disco, 'Plastic Letters': “La primera gira nacional de Blondie por Estados Unidos fue con Iggy, con David Bowie a los teclados”.

"La noche anterior al comienzo de la gira dimos un concierto en Max's Kansas City [en Nueva York], nos metimos directamente en una autocaravana, condujimos hasta Montreal durante la noche y fuimos al local”.

Todo el mundo estaba "todavía desmayado en un camerino funky entre bastidores cuando se abrió la puerta y entraron Bowie e Iggy", dijo Burke. "No pudieron ser más amables".

Además, como anécdota, Burke cuenta qude Iggy y él conectaron por un curioso motivo: “Iggy y yo llevábamos botas Beatle de Anello y Davide, que había conseguido en mi primer viaje al Reino Unido en el 75".

RockFM