Crónica de la última jornada de Mad Cool 2023: Red Hot Chili Peppers y su "picante" experimental

Liam Gallagher y los de Anthony Kiedis, protagonistas del día 3 de Mad Cool 2023
  • Andrés Iglesias: @fotoandresiglesias
Instagram: @madcoolfestival

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Mad Cool ha concluido su edición de 2023 con un sold out absoluto, contando con Liam Gallagher y Red Hot Chili Peppers como las principales atracciones de la jornada en lo que respecta al rock. Un total de 70.000 personas almas acudieron a Villaverde con la intención de despedir el evento por todo lo alto.

A las 20:15, el que fuera vocalista de Oasis subió al escenario para ofrecer un impresionante espectáculo de rock & roll. Siendo sinceros, su conexión con el público fue escasa, casi nula. Sin embargo, al igual que su equipo, el Manchester City, del cual se hizo mención y se pudieron ver banderas y camisetas en el recinto, Liam sabe cómo jugar fuera de casa y ganar el partido igualmente.

Aunque su interacción con los asistentes fue modesta en general, todo cambiaba cuando la música comenzaba a sonar. A pesar del intenso calor, Liam apareció en su pose habitual, con la cabeza en alto y las manos en la espalda, regalándonos un señor concierto.

Los trabajos en solitario de Gallagher son una verdadera delicia, da igual que sean menos conocidos que todo lo que hizo junto a su hermano. Canciones como "Wall of Glass", "Diamond in the Dark", "More Power" o "Once" sonaron realmente efectivas, gracias a su talentosa banda y a los tres coristas que contribuyeron al excelente sonido del inglés.

En ocasiones, Liam hablaba provocando poco más que murmullos. No finge ser lo que no es, algo fundamental en ese aura de rock and roll que lo rodea. Una vez que sube al escenario con sus maracas, su mera presencia es suficiente para imponerse ante aquellos que lo observan. Si Liam no conectó verbalmente con los asistentes, es porque es un auténtico "Mánchester lad" que aún celebra los éxitos del City en la Champions y no se disculpa por ello. Es preferible eso a ser el típico artista que dice cuánto ama España y luego hace lo mismo en su próximo concierto en el siguiente país.

En cualquier caso, también se interpretaron los temas que todos esperaban: "Morning Glory", "Rock & Roll Star", "Stand By Me", "Roll It Over", "Slide Away", "Cigarettes & Alcohol" y, por supuesto, la inevitable y manida "Wonderwall", todos ellos clásicos de Oasis que sonaron a lo largo del recital, el cual concluyó con un último himno: "Champagne Supernova".



El concierto de Liam fue grandioso, con una propuesta sincera y de calidad que dejó una gran sensación de satisfacción y una sonrisa en el rostro tanto de los más fans como de los espectadores ocasionales que querían ver si caía alguna de Oasis.

Aún quedaba el plato fuerte, mientras algunos ya buscaban un buen lugar para esperar, otros iban a ver a Primal Scream o a Shinova, una banda nacional y otra internacional que, según pudimos ver de pasada, estaban funcionando a la perfección.

Los Red Hot Chili Peppers dan un gran concierto... aunque no a todos les guste el picante

Con pocas opciones que les hicieran competencia real en este horario, casi todos los asistentes nos concentramos en el escenario principal de Mad Cool para disfrutar de Red Hot Chili Peppers. Para poder ver a la banda en una posición ventajosa, se necesitaba mucho tiempo o cierta visión espacial. En el caso de quien escribe estas líneas, atravesar el recinto, pasando por unos foodtrucks casi vacíos a esa hora, fue suficiente para encontrar un rincón a la izquierda del escenario, algo más despejado pero lo suficientmente cerca como para poder escuchar todo correctamente (algo que, por lo que se puede leer en redes sociales, no fue así para todo el mundo).

A estas alturas de su carrera, los de Los Ángeles se pueden permitir hacer lo que les plazca, y así lo demostraron. ¿Quién empieza un concierto con una ruidosa improvisación? Solo ellos, y en cierto modo, es genial. Después de eso, comenzó el concierto en sí con "Around the World".

Pese a lo que puedan decir los críticos más exigentes, esta banda no puede dar un mal concierto, especialmente con un Flea que se reinvindicó como el "tocón" que es, y que en más de una ocasión, no dudó en jugar e intercambiar solos con John Frusciante, por fin de vuelta en el conjunto. El bajista incluso tuvo tiempo para conversar con el público e incluso contarle alguna que otra batallita a una pareja del público que estaba a punto de casarse.



Es cierto que lo que mejor funcionó en todo el concierto fueron los clásicos: "Snow (Hey Oh)", "Californication" o "By the Way" fueron algunos de los momentos más destacados de la noche. A pesar de su veteranía, la banda está en plena forma y su capacidad para interpretar estas canciones con tanta fidelidad es una prueba irrefutable de que los Red Hot aún tienen mucho que ofrecer.

Hubo solos largos y pausas entre canciones, sí, y faltaron muchos clásicos (a puñados), pero no fue un mal concierto, simplemente uno que quizás no agradó tanto a los más nostálgicos. Por otro lado, hay que reconocer algo a Anthony Kiedis y compañía: si consultamos sus repertorios de los últimos meses, veremos que cambian de un evento a otro. El grupo no lleva un espectáculo que calcan noche tras noche, sino que introducen, con mayor o menor acierto, modificaciones en ciertos puntos del show. De esta manera, en su presentación del 6 de julio en Portugal, tuvieron a bien tocar "Under the Bridge" o "Can't Stop", temas que no escuchamos aquí. ¿Fue mala suerte? Quizás.

Una banda tan consagrada, a estas alturas de la película, puede permitirse hacer estas cosas y también disfrutar de otras canciones de su repertorio. Después de todo, no hay que olvidar que Red Hot lanzaron la friolera de dos discos el año pasado y que también toca defenderlos en directo, con cinco temas nuevos de los 15 (16 con la improvisación) de los que se compuso el recital. Otras bandas y artistas tan dispares como Bob Dylan o Iron Maiden también hacen, con más o menos frecuencia, lo propio, descartando muchos clásicos durante giras enteras, y levantan menos ampollas.

El picante de Red Hot Chili Peppers, a estas alturas, puede no ser para todos, pero su recital de anoche, aunque quizás menos "familiar" de lo esperado, fue un concierto en toda regla. Bravo por ellos.

RockFM